" La libertad no se conquista de rodillas, sino de pie, devolviendo golpe por golpe, infringiendo herida por herida, muerte por muerte, humillación por humillación, castigo por castigo. Que corra la sangre a torrentes, ya que ella es el precio de su libertad."
Compañerxs presxs
¡Adelante! El insulto, el presidio y la amenaza de muerte no pueden impedir que el utopista sueñe …